Dentro de la Segunda Reunión de la Cultura de la Paz organizada por la Asociación Nacional de
Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) se estableció como uno de los
compromisos el asumir una postura sobre la calidad educativa aún más humanista en lo universal, más
dialógica en lo que a comprensión, responsabilidad compartida y convivencia humana se refiere, y más
trascendental en lo que a la conservación de la paz y derechos humanos concierne. En el marco del
Plan Integral de la Estrategia Nacional de Prevención de Adicciones “Juntos por la Paz”, orientado a
combatir las adicciones y sentar los ejes fundamentales de una convivencia basada en principios y
valores que nos da una lógica de construir una gobernabilidad de Estado, se reunieron cerca de 209
instituciones de Educación Superior en la ANUIES.
Dicho evento contó con la participación del Mtro. Jaime Valls Esponda, secretario general de la
ANUIES, del Dr. Francisco Concheiro Bórquez, Subsecretario de Educación Superior de la secretaria de
Educación Pública, del Dr. Francisco Javier Gorjón Gómez, director de Posgrado de la Universidad
Autónoma de Nuevo León, del Lic. Jesús Ramirez Cuevas, Coordinador de Comunicación Social de la
Presidencia de la República, así como del Dr. José Manuel Valenzuela del Colegio de la Frontera
Norte. En el presídium también estuvieron presentes el Mtro. Herminio Baltazar Cisneros de la
Coordinación de Universidades Tecnológicas y Politécnicas, y el doctor Enrique Fernández Fassnacht
del Tecnológico Nacional de México. Esta estrategia está orientada a combatir las adicciones y
sentar los fundamentos de una convivencia basados en principios y valores que nos dan un perfil como
Estado, así lo expresó el Dr. Francisco Concheiro Bórquez, además señaló que esto nos “ayuda a
colaborar y construir un sentido de Estado. Estamos ampliando el Estado y estamos comprometidos más
allá del gobierno y esto desde nuestras Instituciones de Educación Superior, se abre un compromiso
con la sociedad”.
Por su parte el Dr. Javier Gorjón apuntó que el gran tema de la paz es asegurar un Estado de
Derecho, así como políticas públicas e instrumentos de prevención.
Se llegó a la conclusión que las universidades y, en general desde la Instituciones de Educación
Superior, generen una gran aportación con la participación de todos: a través de los programas de
estudios, el compromiso de rectores, académicos, estudiantes, funcionarios, por la paz, por lo que
se debe actuar como un sistema de redes en que debe de intervenir junto con el Estado, la familia
como ente primigenio de la red social con sus principios y valores, las escuelas superiores como
aportación de conocimiento y la sociedad como baluarte de estos conocimientos.
El plan de acción se sintetiza en fortalecer la campaña “Juntos por la Paz”; implementar esquemas de
salud para desmotivar el uso de drogas; promover talleres de educación, en los cuales trate el tema
de las adicciones de manera preventiva; integrar un grupo interdisciplinario de expertos y
académicos sobre los temas de la paz; conformar una “escuela de la paz” donde se implemente dicha
cultura en los planes de estudio; proponer métodos de solución de conflictos y negociación en la
sociedad; propiciar espacios de participación ciudadana por la paz; fortalecer la participación de
los jóvenes, directivos y de todo el personal que está involucrado en las Instituciones de Educación
Superior en el desarrollo de la cultura de la paz.